lunes, 31 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 9.

"No quiero que te vayas, quédate aquí conmigo, vive en mi mundo."
Me desperté con esas palabras en la mente, era lo último que me había dicho Justin ayer antes de irnos a la cama. Había venido a mi cuarto después de cenar para hablar, aún podía sentir sus palabras en mi oído y su suave y lento beso en mis labios. 
" - No Justin... no me beses por favor- dije con una voz leve y sin fuerzas.
 - Sabes que esto lo queremos los dos, déjame hacerlo- susurró en mi oído.

En ese momento sentí como sus labios rozaban los míos. Dejé que su lengua entrara en mi boca jugando con ella, besaba demasiado bien, no podía parar, necesitaba más de aquel beso, le necesitaba a él. Nos separamos con la respiración entrecortada y me dio un suave beso en la frente.
 - Buenas noches nena, nos vemos mañana- dijo saliendo del cuarto sonriendo.
 - Buenas noches...- dije sin palabras."

Recordé ese momento cuando me estaba duchando y no pude contener la enorme sonrisa que salió de mi rostro. Salí de la ducha, me sequé el pelo dejándolo completamente liso, me puse base, un poco de rimel en mis pestañas y brillo de labios rosa. Me vestí con una camiseta de tirantes negra con las palabras "F*CK U BITCH" en blanco y unos shorts blancos rotos por los bolsillos. 
Escuché mi móvil sonar en la mesilla de noche.

 - ¿Sí?
 - Eli estamos abajo en el hall, vamos a salir todos por última vez antes de irnos.
 - Oh esta bien Javi, en cinco minutos estoy abajo.

Me puse mis Vans negras y mis gafas de sol. Salí del cuarto y sentí como alguien venía detrás de mi.
 - ¡Hey! - dije sonriendo a Justin.
 - Hola Eli, ¿cómo estás hoy?- pregunto dándome un beso en la mejilla.
 - Genial, pero triste, mañana ya nos vamos- dije haciendo un puchero mirándole a los ojos.
 - Es cierto, de eso quería hablarte, pero más tarde cuando volvamos- dijo entrando en el ascensor detrás de mí.

Salimos y vimos como todos nos estaban esperando, mi madre me miró seriamente. No habíamos hablado casi nada desde que estábamos aquí, ella siempre estaba con Kenny y yo estaba siempre con Justin, Ryan o Fredo, no podíamos coincidir y supongo que eso la molestaba, pero intenté dejarlo pasar.
Nuestro paseo fue increíble, fuimos a un zoo y yo estaba encantada viendo los animales. Entramos en una sala y vimos a bebés oso. Me apoyé en la valla y me di cuenta de que Justin estaba entrando.

 - Eh, ¿qué haces? No puedes entrar ahí- dije alarmada mirando a Justin.
 - Oh nena yo si puedo, soy Justin Bieber, venga entra, he hablado con la mujer y no nos harán nada- dijo acariciando el oso.

Después del zoo fuimos a cenar y todos nos pusimos emotivos, iba a echar de menos esa gente, eran tan buenas personas, cada una especial a su manera, se veía que amaban trabajar en este mundo.
Al llegar al hotel estábamos todos muy cansados, no teníamos ganas de hablar, mañana nuestro vuelo saldría a las dos del mediodía y todos queríamos descansar. 
Mi madre entró primera a la habitación dándome un beso de buenas noches y luego Elena me abrazó, entrando con Javier en su cuarto. Me dispuse a entrar en mi habitación cuando una mano agarró la mía y me encontré con unos ojos color marrón miel  mirándome muy fijamente. 
 - Ven esta noche conmigo- dijo Justin en un susurro.
 - Mmm... está bien- dije eclipsada por su mirada.

domingo, 30 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 8.

Sus ojos no mostraban ningún signo de alegría, eran fríos como el hielo, nunca le había visto esa mirada,  ¿asustarme? no completamente, pero sí me inquietaban.
 - ¿Qué pasa?- le miré preocupada.
 - Tienes que saber una cosa. Mi mundo... el mundo que tú conoces no es realidad, yo no soy como me muestran en las cámaras, tienes que tener eso siempre en cuenta Elizabeth.
 - Vale, pero ¿por qué me dices eso ahora Justin? - pregunté curiosa con un nudo en la garganta.
 - Una vez que salgas por esa puerta tu mundo va a cambiar, quieras o no, para bien o para mal, pero va a cambiar y no podrás hacer nada para evitarlo, quiero que tengas eso en mente, Eli- me miró acercándose más a mí.
 - Sé que no va a ser fácil esto, pero quiero seguir adelante, quiero cumplir mi sueño de alguna manera u otra, quiero esto Justin, he tomado la decisión - le miré con miedo a su reacción.

Miré sus ojos color marrón claro y vi como poco a poco empezaban a calentarse, ya no había esa mirada intimidante, ahora era la mirada con la que todas nosotras deseábamos ver cada día en su cara.

 - Ven, dame un abrazo- dijo abriendo sus brazos.

Me acerqué y note como sus brazos rodeaban mi cintura. Apoyé mi cara en su pecho y pude notar como su corazón latía despacio, era uno de los mejores sonidos que había escuchado en mi vida. Mis brazos abrazaron su espalda más fuerte y no quise desprenderme de ellos, pero el tiempo corría y él tenía un concierto por dar.
Nos separamos de ese cálido abrazo y nos dirigimos al hall donde nos esperaban Elena, Javier y Ryan. Nos miraban sonrientes y me dirigí al ascensor ante las mirada de todos.

 - ¿Qué pasa, no vamos a bajar al parking subterráneo?- pregunté mirando a todos.
 - No, vamos a salir por la puerta principal, hay muchas fans y quiero hacerme fotos con ellas - dijo mirándome con una gran sonrisa.
 - Oh, vale, me encanta que hagas eso- contesté dirigiéndome al lado de Elena.

Sentí como el brazo de Justin pasaba por mis hombros acercándome a él. Fuera había un sol impresionante y había muchas chicas esperando. Cuando salimos pude sentir en mis tímpanos los gritos de esas chicas y sonreí sin poder evitarlo recordando que tiempo atrás yo estaba igual que ellas.
A un lado pude ver también paparazzis haciéndonos fotos, suspiré sin poder remediarlo, eran un grano en el culo cuando querían.
Nos metimos en el coche, Justin y Ryan se quedaron fuera hablando con las chicas. Miraba por la ventana sonriendo, viendo la sonrisa que mostraba con cada una de esas chicas, lo feliz que se sentía al hacer su trabajo.

Después del viaje en coche entramos al estadio, era enorme y por primera vez veía uno desde dentro. Nos sentamos en un sofá y Justin se empezó a preparar para el concierto. Empezamos a hablar con Fredo de cosas sin sentido, era un chico realmente simpático y te podía hacer reír en cualquier momento.
Empecé a escuchar gritos de fans.

 - ¿Qué es eso?- pregunté confundida.
 - Oh, es la prueba de sonido que tiene Justin y hoy ha dejado pasar a algunas fans, supongo que estará enseñando sus abdominales, esta orgullo de ellos- dijo soltando un tono de sarcasmo.
 - Hahaha, puede ser, tiene que estar orgulloso de ellos, son...- y entonces noté como me estaba saliendo la fibra Belieber y Fredo empezó a reírse sin parar.
 - Oh Eli, deberías guardar esos comentarios para ti, porque si te oye se le subirá aún más el ego- dijo sin poder parar de reír.

Sentí como mis mejillas empezaban a ponerse rojas y eso le hizo reír mucho más a Fredo.
Vi el concierto desde atrás y estaba realmente emocionada, todo era tan diferente desde dentro, podía sentir la emoción del momento, mis oídos vibraban por la música fuerte, pero eso no me importaba. Elena me abrazó y miramos las dos orgullosas a nuestro ídolo.

Al acabar el concierto nos fuimos a cenar a un restaurante cerca de hotel, no paraba de reírme todos eran tan amables...

Pasaron los días viajamos a otros lugares, yo estaba en una nube de la que no quería bajar, todo era especial y cada sitio, cada momento era único para mí. Empecé a acercarme mucho más a todo su equipo, ya no me incomodaba tanto hablar con ellos, cuando me dí cuenta que estabamos a nueve de septiembre, en unos días tendría que volver a casa, empezar las clases y todo esto acabaría.
O al menos eso pensaba.

viernes, 28 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 7.

Abrí los ojos y el sol me cegó por segundos hasta que se acostumbraban a la luz. Era la primera vez en mucho tiempo que había dormido tan cómoda. Miré mi Xperia y eran las once de la mañana. Abrí Twitter y lo primero que vi fue una mención de Elena.

       Vía Twitter: Disfruta de esto, te lo mereces #DreamCometrue #Believe @biibii_lokaaxti

Entré al baño para darme una ducha rápida para despejarme un poco, no sabía lo que iba a hacer hoy, pero tenía la sensación de que iba a ser algo que me iba a gustar de verdad. Salí de la ducha y cogí unos shorts negros rasgados y me puse una camiseta de tirantes con las letras "Believe" en ella, me puse unas sandalias y sequé mi pelo rubio hasta dejarlo casi liso. 
Noté como mi móvil sonaba desde la cama.

 -Sí?
 - Eli soy mamá, estamos en el comedor del hotel con todo el equipo de Justin, cuando estés preparada baja.
 - Vale mamá, dame cinco minutos y bajo.

Me puse un poco de base, brillo de labios y perfumé por toda la parte de mi cuello y  las muñecas, olía a cereza, me encantaba ese olor.
Entré en el ascensor y le di al botón de bajar, miré al suelo y noté como alguien entraba detrás de mí, al levantar la vista no reconocí a ese chico, pero después de unos segundos supe quién era.

 - ¡Oh dios mío, eres Fredo! - dije casi gritando.
 - Mmm sí, ¿y tú eres una Belieber, cómo has podido entrar aquí?- miró confuso mi cara con un poco de miedo.
 - Oh sí soy Belieber, pero estoy de invitada, Justin... me ha invitado- dije con un poco de vergüenza.
 - Oh, tú eres Elizabeth. ¿verdad?- dijo sacando una enorme blanca sonrisa.
 - Sí, ¿cómo sabes mi nombre?- dije extrañada.
 - Oh Justin no ha dejado de hablar de ti desde que te vio en Los Angeles- dijo saliendo del ascensor y soltando una risa.

¿Justin no había dejado de hablar de mí? ¿Esto era un sueño? porque si lo era no quería despertar nunca.
Llegué al comedor y todos estaban ya sentados desayunando, Elena me miró y una gran sonrisa salió de su boca, estaba hablando con Ryan y Dan, me parecía increíble lo rápido que se podía adaptar a esta situación. Javier estaba hablando con Nick y por lo que parecía él también se había adaptado muy bien al lugar y la gente. Mi madre hablaba con Kenny de una conversación muy interesante porque le miraba sin parar y de vez en cuando soltaba una leve risa ocultándola con una de sus manos. 
Había un sitio libre al lado de Justin y Elena me senté y miré a todos diciendo un "hola" con una gran sonrisa. Justin me miró sonriendo y dejo un suave beso en mi mejilla con un "buenos días". Sonreí ante ese beso y respondí con un susurro.
Desayuné un vaso de leche, no tenía mucha hambre, tenía el estómago revuelto al estar con esta gente. ¿Esperaban que actuara normal cuando tenía delante a todo el equipo de Justin y este estaba a mi  lado mirándome sin parar? porque era algo sumamente difícil.

- Bueno chicos es hora de ir al estadio, tenemos que prepararnos - dijo una voz desde la otra esquina de la mesa. Miré y era nada menos que Scooter.
 - !Scooter! - dije sin pensar y toda la mesa puso sus ojos en mí. Elena me agarro del brazo y en ese momento me di cuenta. "Elizabeth actúa con normalidad".
 - ¿Sí, querida?- dijo él sorprendido por mi llamada.
 - Buenos días, no te... había visto- dije sin pensar.
 - Oh querida buenos días, espero que te sientas a gusto estos días con nosotros, Justin estaba muy contento de que vinieras - dijo sonriéndome dejando su vaso en la mesa y levantándose. - No lleguéis tarde chicos, ¡el trabajo nos espera!.
Sentía como mi empezaba a arder y como mis mejillas dentro de poco tiempo estarían de un color rojo, aún me estaban mirando todos. 
Justin se dio cuenta de que me sentía incómoda y empezó una conversación con todos. Poco a poco todos empezaron a levantarse y quedamos en la mesa Elena, Javier, mi madre, Kenny, Ryan, Justin y yo. 
Nosotros también nos levantamos, sentí como una mano cogía mi brazo, ese era Justin.

 - Elizabeth, tenemos que hablar de una cosa muy importante- dijo con una mirada seria. 

jueves, 27 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 6.

Noté los ojos de Justin mirar los míos fijamente, no sabía que hacer, estaba hipnotizada por él. Su cuerpo rozando contra el mío, sus ojos mirando los míos y sus labios tan cerca de los míos me dejaban sin aliento.
Sentí sus manos alrededor de mi cintura, empezó a emerger un calor de mi cuerpo y no entendía el por qué, había soñado con este momento desde hacía años y ahora estaba otra vez a punto de cumplir ese sueño.

 - Justin, yo...- las palabras no pudieron salir de mi boca.
 - ¿Sí, Elizabeth?- dijo susurrando cada sílaba de mi nombre.
 - Te-tengo calor, mucho calor - dije con un suspiro. Vi cómo Justin empezó a acercarse cada vez más a mi cuerpo.
 - ¿Y ahora, tienes más calor?- dijo susurrando en mi oído esas letales palabras.
 - Sí, Justin... aléjate de mí por favor, no.. no puedo estar tan cerca tuya- dije mirándole a los ojos.
 - ¿Estás segura de eso?- dijo sonriendo.

Asentí y Justin se alejó lentamente de mi cuerpo dejando un suave beso en mi mejilla.

 - ¿Qué película vamos a ver?- dijo mirándome con una gran sonrisa.

No podía responder aún, estaba en shock, aún podía sentir sus dedos en mi cintura y oler su agradable olor. Ahora me arrepentía de no haber seguido, pero no podía, no iba a dejar que Justin hiciera tal efecto en mí, tenía que dejar de pensar en Justin como ídolo y tenía que desconectar esa parte de mi cuerpo con él, tenía que empezar a pensar en verlo como un amigo.

 - Me da igual, pon la que quieras- dije abriendo la carpeta con mis películas descargadas.
 - Vale, yo elijo- dijo tumbándose en mi cama poniendo el portátil encima suya.
 - ¿Cómo pretendes que yo vea la película?- dije cruzándome de brazos.
 - A mi lado, túmbate tú también, no muerdo- dijo haciendo un hueco más grande para que yo me pudiera tumbar me.

Me tumbé a su lado y fijé mi vista en la pantalla del portátil, no sabía que película había elegido, pero para ser sinceros me daba igual, solo quería ver algo antes de dormir.
 - Espero que te guste la película, es una de mis favoritas- dijo mirándome fijamente.
 - ¿Cuál es?- dije con curiosidad.
 - Derecho a roce- dijo levantando su ceja.

Oh madre mía, esta noche iba a ser una tortura.
Empezamos a ver la película, estuvimos todo el rato callados, no decíamos ni una sola palabra, estábamos tan sumamente concentrados que sin darme cuenta mi cabeza estaba apoyada en su pecho.
Cuando acabó la película miré hacia arriba y me di cuenta de que Justin se había quedado dormido. Su cara estaba totalmente relajada y su boca levemente entreabierta. Una sonrisa salió de mi boca.

 - Justin, despierta, te has quedado dormido- dije empujándole suavemente.
 - ¿Eh? ¿Qué ha pasado? ¿Dónde estoy?- dijo mirando la habitación confundido.
 - Estás en mi cuarto y te has quedado dormido viendo "Derecho a roce"- dije poniendo una mueca de ternura.
 - Ahh vale, lo siento Eli, estoy muy cansado con los conciertos, mañana tengo otro y no doy abasto- dijo excusándose.
 - No pasa nada Justin, es normal- dije levantándome de la cama.

Justin también se levantó, fue hacia la puerta y antes de irse me dio un suave beso en la mejilla diciendo "buenas noches tesoro" en un leve susurro.
Cerré la puerta y me apoyé en ella, no podía creer que esto estuviera pasando. Hace un mes me quejaba de no tener suerte y ahora tenía la mayor suerte del mundo.
Me tumbé en la cama y cogí el móvil para intentar relajarme un poco intentado procesar lo que había pasado hoy.
Abrí Twitter, tenía muchas interacciones pero me daban igual, no iba a leer nada, no iba a dejar que me afectara otra vez.

       Vía Twitter: vacaciones con la mejor, estamos cumpliendo nuestro sueño cariño @J_heeleen_B

Cerré Twitter y mis ojos se cerraron poco a poco dejando unas últimas imágenes, Justin besando mis labios.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 5.

Miré los grandes ojos marrones de Elena con miedo a una respuesta no deseada, tenía miedo de perderla y no quería que pasara eso.

 - Elizabeth... no me pasa nada contigo- dijo mirando a sus vaqueros.
 - Elena te conozco perfectamente y sé que te pasa algo y sé que no me lo quieres contar, y no me iré de aquí hasta que me lo cuentes-  dije mirándola a los ojos.
 - No estoy enfadada contigo, lo que me pasa es que tengo miedo- dijo mirándome a los ojos.
 - ¿Miedo? ¿A qué?- dije mirándola sin entender.
 - Miedo a que entres en este mundo y te olvides de los que te quieren - dijo susurrando las últimas palabras. 
 - Elena no va a pasar eso, nunca - dije abrazándola 

Después de esa conversación llamamos a Javier y él entró en la habitación y empezamos a hablar como siempre solíamos hacer. Elena me preguntó qué había pasado con Justin en su cuarto, pidió detalles y todo empezó a ser como era antes, sin problemas.
Sentí como mi móvil vibraba en mis shorts y abrí la bandeja de correo.

     Mamuchi:
       "Me alegra que te lo estés pasando bien aquí, pero no te olvides de tu madre, cuando acabes ven a               verme. Te estaré esperando en mi cuarto".

Mi madre estaba molesta conmigo, se notaba por su mensaje. Me levanté y me despedí de los chicos, no quería tener problemas con mi madre.
Llamé a su suite y ella me abrió recibiéndome con un gran abrazo, no me esperaba eso la verdad. Me senté en su cama. 

 - Hola mami - dije mirándola y sonriendo.
 - Hola cariño, ¿qué tal ha ido la tarde con tu hermana?- preguntando sentándose al lado mío.

Empecé a contarle como había ido la tarde con Andrea, la sorpresa de Justin al venir con todos, le conté todo menos una cosa, no le iba a contar lo que había pasado en la habitación de Justin, no ahora. Me encantaba hablar con mi madre y la sentía como una amiga, pero para estas cosas era muy reservada.
Después de pasar un tiempo hablando me enteré que estuvo toda la tarde con Kenny dando vueltas por Las Vegas. La noche iba pasando y cuando me di cuenta ya eran las doce de la noche. Me despedí de ella dándole un beso en la mejilla y me fui hacia mi suite.

Me di una ducha y me tumbé en la cama sacando el portátil. Tenía ganas de ver una película, pero no quería verla sola y ahora mismo no tenía mucha compañía. Mi móvil empezó a emitir una canción, mi favorita de Justin. 

 -¿Sí?
 -¿Aún no tienes mi número guardado? Muy mal señorita Collins.
 - Justin estamos a una habitación y, ¿me llamas al móvil?
 - Lo sé, tenía ganas de escuchar tu voz, ¿qué haces?
 - Voy a ver una película, ¿te gustaría venir a verla conmigo?
 - ¿Cuál vas a ver? 
 - No tengo ni idea, pero no quiero ver nada sola.
 - Dame dos minutos y voy.

Me sorprendía la facilidad que tenía para hablar con Justin, había desconectado el chip de "él es un chico famoso aparte de ser tu ídolo" y le estaba empezando a ver como un chico normal y eso me encantaba.
Al cabo de unos minutos Justin llamó a mi puerta. Le abrí y él entró con una gran sonrisa en su rostro.
Se sentó en la cama y miró mi fondo de pantalla del portátil. Era él sin camiseta, maldije para mis adentros e hice como si no pasara nada.
 - Que guapo salgo en esa foto, ¿verdad?- dijo mirándome con una gran sonrisa.
 - Esto... sí, me encanta la sonrisa que tienes en esa foto- dije intentando no darle importancia al asunto.
 - Por lo visto también te gusta otra cosa aparte de mi sonrisa- dijo levantando la ceja y guiñándome un ojo.
 - Ohhh Justin para ya, no me hace gracia, deja el ordenador- dije enfurruñándome y cruzando los brazos haciendo una mueca de enfado.
 - Bueno vale, pero porque eres tú, a saber las fotos que habrá mías en alguna carpeta- dijo riéndose de mí.
 - Justin, te voy a tirar la almohada como sigas así- dije seria.
 - Uhhh- dijo riéndose a carcajadas.
Cogí una almohada y se la tiré a la cara, se lo había advertido y no me hizo caso. Oí un "auch", pero no le hice caso, se lo tenía merecido.

-Aparta tu culo, no me dejas espacio para sentarme-dije empujándole de la cama.

Justin se apartó, se estaba riendo y eso me enloquecía, tenía una risa especial y única, era contagiosa y sin darme cuenta me estaba riendo yo también. No podía parar de reír y sin darme cuenta estaba tumbada en la cama al lado de Justin con nuestros labios a centímetros. Le miré los labios, eran rosados y tenían una forma perfecta. Sentí como mi respiración iba cada vez más rápida.

  -Elizabeth...- dijo Justin en un susurro.

martes, 25 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 4.

Escondí mi cabeza con mis manos, no tenía ganas de seguir hablando con mi hermana de ese tema, no entendía lo importante que era esto para mí, estaba cumpliendo algo que nunca pensé que podría llegar a conseguir.
 - Elizabeth Marie Collins, levanta la cabeza y mírame, dime que no estás preocupada por el niñato- dijo acercando su mano a mi mano.
 - ¿Quieres que te mienta o que te diga la verdad, Andrea?- me miró con su mirada de "cuéntamelo ahora" y no pude estar por más tiempo callada. - Nos besamos antes de venir a verte, me preguntó si quería estar con él y le dije que no. No estoy segura de querer estar en este mundo.
 - Hemos estado tres horas aquí y, ¿ahora me cuentas que te has besado con Justin Bieber? - dijo elevando a voz.
 - Shhh, ¿quieres que se entere todo el mundo y que me coman viva? dije ocultando la mirada otra vez.
 - Bueno yo me callo y... hablando del rey de Roma acaba de entrar por la puerta. - dijo mirando en su dirección.

Me di la vuelta y ahí estaba él, con unos pantalones caídos, una camiseta de tirantes, Supras y una gorra. Le sonreí al verle venir hacia nosotras. Detrás iban Elena, Javier y Ryan, sonreí a Elena, pero ella me miró con una cara muy seria, no entendía nada, ¿qué le pasaba?
Elena se sentó al lado de mi hermana, Javier a su lado, Ryan en el mío y Justin cogió una silla para sentarse a mi otro lado.
Andrea se presentó a Ryan, pues a Elena y Javier les conocía desde que éramos pequeñas.

 - Hola, soy Andrea, la hermana mayor de Eli- dijo estrechando la mano con Justin.
 - Hola, yo soy Ju.. - dijo Justin siendo cortado.
 - Sí sí, eres Justin Bieber el chico por el que mi hermana pierde las bragas, he escuchado hablar tantísimas veces hablar de ti...-  dijo Andrea mirándome.

Todos empezaron a reírse, yo no sabía donde meterme, ¿cómo es posible que Andrea hubiera dicho eso? La miré con la mirada más cruel y asesina y dí un sorbo a mi bebida.

 - Oh hermanita no pasa nada, si el chico está acostumbrado a chicas como tú- dijo sonriéndome.
 - Andrea Stephany Collins cállate de una puta vez, gracias- dije mirándola con odio.
 - Ohh Eli no me importa si estoy acostumbrado, me hace gracia que al menos ella es sincera conmigo y me dice lo que sientes por mí- dijo guiñándome un ojo.
 - Oh por dios, voy a callarme. ¿Elena que has hecho hoy?- mi cara se volvió hacía donde estaba Elena.
 - Nada interesante Elizabeth- dijo con un tono seco.

Elena estaba muy seca conmigo, no entendía por qué razón se estaba comportando así, no había pasado nada que yo supiera.

Pasamos la tarde hablando de cosas sin sentido, Elena y yo nos ignorábamos, estaba descubriendo una faceta no muy conocida de él, el de una persona normal. Andrea hablaba con Justin sin problemas, no estaba borde, toda la tarde estaba yendo como yo esperaba.
Al final de la noche nos despedimos de mi hermana, empecé a tener un nudo en el estómago, no sabía cuando la volvería a ver y eso me entristecía.

 - Prométeme que nos volveremos a ver antes de que me vaya - dije escondiendo el rostro en su pecho.
 - Te lo prometo princesa- dijo alejándome lentamente de ella. - ¡Ehh Justin te advierto de que como le hagas daño a mi hermana te buscaré y te patearé el culo como nunca nadie te lo ha pateado!
 - Tranquila no le haré daño, tengo miedo a que me patees el culo - dijo riendo poniendo su mano en mi hombro acercándome a él.

Entramos en el coche, no quedaba ningún paparazzi fuera. Elena me ignoraba totalmente, estaba hablando con Javier y Ryan haciendo parecer que no estaba dentro del mismo coche con ella.
Estaba al lado de Justin, sentía su calor emerger por su cuerpo, tenía ganas de acercarme más a él, pero estaba prohibido, no iba a dejar que el deseo me controlara.
El coche nos paró en la entrada principal, fuera estaba lleno de fans gritando alocadamente el nombre de Justin y Ryan. Justin se paró fuera a firmar algunos autógrafos y hacerse fotos con sus fans y nosotros seguimos nuestro camino entrando en el hall.
Ryan dijo que se iba a quedar esperando a Justin por lo que me quedaba subir a mi cuarto con Elena y Javier.
El viaje en ascensor se estaba haciendo eterno, ninguno hablaba, todos mirábamos al suelo. Cuando las puertas se abrieron salí la primera de ahí y corrí rápidamente hacía mi habitación, no iba a dejar que Elena viera las ganas terribles de llorar que tenía.
Cerré la puerta y mis lágrimas empezaron a desbordarse por mis mejillas. Lloraba en silencio, sentía una gran soledad en ese momento, no sabía que estaba pasando, pero estaba decidida a entenderlo en ese mismo momento. Sequé mis lágrimas con orgullo y llamé fuerte a la puerta de Elena.

 - Hola Eli, esto... no es un buen momento, ¿puedes venir luego?- dijo Javi poniendo una cara de disculpa.
 - No, no voy a irme de aquí hasta que Elena me diga que le pasa - dije entrando en la habitación .

Javier por segunda vez hoy salió de su cuarto dejándonos solas. Había un silencio terrible.

 -Elena no me voy a ir de aquí hasta que no me digas que pasa, necesito saberlo, eres como mi hermana- dije mirándola con miedo.


miércoles, 19 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 3.

No sabía que decir ante esas palabras, no sabía cómo actuar ante esa persona, por eso decidí sonreír y salir de ese cuarto sin hacer ni decir nada.
Entré en mi cuarto y me cambié de ropa. Me puse unos shorts rosas, una camiseta de tirantes blanca y mis Vans negras, un poco de lápiz labial, de gloss, de rímel, me peiné y ya estaba preparada. Aún quedaban quince minutos, pero yo decidí salir ya de mi cuarto y encaminarme hacía el Starbucks.
Cuando salí del cuarto vi a un hombre enorme esperándome.

 -Señorita soy Louis y voy a estar con usted todo el rato en los próximos días - dijo ese hombre mirándome serio.
 -¿Todos los días? Justin dijo que solo por ahora - le dije desconcertada.
 -Justin ha cambiado de idea, ahora será a todas horas, todos los días, siempre conmigo - me dijo intentando sonreír en esa cara tan seria que tenía.
 -Mm... Vale, ya hablaré con Justin de esto, tenemos que ir al Starbucks que está aquí al lado, he quedado con mi hermana - dije caminando hacía el ascensor.

Le envié un mensaje a mi madre diciéndole que iba  a estar con Andrea y a Elena otro contándole brevemente lo que había pasado en el cuarto con Justin.
Cuando llegamos al hall me dispuse a salir por la puerta cuando la mano de Louis me tocó.
 - Señorita por aquí no, fuera está lleno de gente que no nos interesa que la vean- dijo llevándome al parking subterráneo.
 - ¿Me puede llamar Eli, por favor? - dije mirando a Louis con un poco de miedo.
 - Claro señorita... Eli, claro Eli - dijo sonriéndome.

Llegamos a un Jeep negro, me subí a la parte de atrás, Louis empezó a conducir y por primera vez supe como podía llegar a sentirse Justin, no digo lo mismo porque era imposible, pero si una pequeña parte. Flashes intentando entrar por los vidrios tintados, intentando sacarme una foto, intentando ver quién es "el nuevo capricho de Justin Bieber". Escondí la cabeza como pude, no podía estar en este mundo, no iba a poder soportarlo.
Llegamos al Starbucks, no sabía cómo salir del coche, hasta que Louis me abrió la puerta del coche y me protegió de los flashes con su cuerpo.
Entré dentro y aún no estaba mi hermana, aún quedaban cinco minutos, pero obviamente ella llegaría tarde, siempre llega tarde a todos los sitios. Pedí un Mocca Blanco y me senté en una mesa en una esquina, intentando protegerme de algo que ni siquiera yo sabía lo que era, cuando vi a mi hermana entrar, su melena rubia había desaparecido dejando con ella una larga melena negra. Su pelo ya no era tan largo como recordaba, ella misma no era la misma, había crecido y había desarrollado el cuerpo de mujer que le pertenece.
Me levanté y ella al verme sonrió de una manera que solo ella puede. Nos abrazamos por una eternidad, no quería soltarme de ella, pero era necesario, toda la gente nos estaba mirando y no quería dar un espectáculo, no ahí.
Había cosas que no habían cambiado en ella, seguía pidiendo Frapuccino, se sentó en la mesa en frente mía y por primera vez en mi vida no sabía cómo hablar con ella.

 -Hola petarda- dije sin elevar mucho mi voz.
 -Hola amorfa, por fin nos vemos - dijo bebiendo un poco.

No me acuerdo por cuánto tiempo estuvimos hablando, ni siquiera me acuerdo haber pedido otro café, ni me di cuenta de que el sol se había ocultado dejando un atardecer de por medio hasta que una persona me recordó el lugar el que estaba.
 - Sí?
 - Elizabeth, soy Justin, ¿dónde estás?
 - ¿Cómo es que tienes mi número?
 - Bueno eso da un poco igual, dime donde estas y voy.
 - Justin no es muy buena idea que vengas.
 - Me da igual, voy a ir y Elena, Javi y Ryan también. En quince minutos estamos ahí.
 - Esta bien, estamos en el Starbucks de aquí al lado.

 - Déjame adivinar, ¿el niñato viene? - dijo Andrea riéndose.
 - Sí y deja de llamarle niñato, sabes que no me gusta que le llames así. - dije seria.
 - Bueno y tú sabes que no me gusta que te guste ese chico, nunca entenderé por qué te gusta- dijo Andrea riéndose.
 - Yo tampoco entenderé nunca por qué no te gusta Justin, con lo perfecto que es - dije sacando una sonrisa tonta.
 - Ohh nena baja de las nubes, sabes que no vas a durar mucho en su mundo, no te he dicho nada, pero..., ¿estás segura de querer estar en un mundo donde te van a seguir incluso hasta cuando quieras cagar? - dijo Andrea subiendo el tono de voz.
 - No, no estoy segura de si quiero estar en este mundo, ni siquiera estoy segura de por qué tengo la posibilidad de estar en ese mundo, pero de una cosa estoy segura, no voy a desperdiciar ningún minuto junto a Justin sea como sea - dije mirándola muy seriamente.




miércoles, 12 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 2.

 - No.. no sé que ha pasado, no tenía que pasar esto - dije alejando mi frente.
 - Eli... ¿qué es lo que no puede pasar, tienes novio eso es lo que pasa?- dijo mirándome intentando ocultar la sonrisa que le salía de los labios.
 - Justin esto no hace gracia, tú eres tú, y yo soy... soy Elizabeth Collins, no entiendo por qué me has elejido a mí y no, no tengo novio - dije acercando mi mano a su mejilla.
 - Porque he visto en ti algo en lo que no había visto en nadie, no preguntes más, esa es la única explicación, ahora tengo que preguntarte algo- dijo agarrándome la mano. - ¿Quieres estar conmigo?
 - Justin, quiero, pero no voy a estar contigo, no por ahora, no sabes nada de mí y yo solo sé de ti lo que dejas que se sepa de tu vida, necesito conocerte y estar segura de mi decisión - dije apretándole la mano suavemente. - Quiero asegurarme que puedo vivir la vida que tienes, con todos estos rumores, con todos estos dramas, quiero conocerte como amigo.
 - Esta bien lo veo justo, tienes que conocerme, pero prométeme que pensarás las cosas con el corazón - dijo Justin sonriéndome.
 - Por dios si hubiera pensado así ahora mismo no estarías vestido, recuerda soy Belieber y bueno eres el deseo de muchas chicas - dije riéndome.
- Esta bien, no quiero saber más sobre ese tema. no quiero que seas Belieber, quiero que seas mi amiga, ¿podrás? - dijo mirándome a los ojos.
 - Sí, sí podré. Hoy tengo que salir de aquí, tengo que ver a mi hermana Andrea - dije levantándome de la cama.
 - Vale, pero vas a salir con un guardaespaldas, ahora mismo tú eres el drama - dijo Justin cogiendo el movil. - ¿A qué hora vas a salir?
 - Llamaré a mi hermana ahora, supongo que en media hora saldré- dije mirando con curiosidad.

Cogí el móvil y marque el número de mi hermana.

 -Sí?
 - Andrea soy Eli, ¿estás libre?
 - Sí hoy tengo todo el día libre, ¿quieres qué nos veamos ahora?
 - Sí, te echo mucho de menos.
 - ¿Dónde estas?
 - Estoy en el hotel Wynn.
 - Vale a cinco minutos hay un Starbucks, te espero ahí en media hora, ¿te parece bien?
 - Perfecto, hasta ahora

Colgué y miré de nuevo hacia Justin, me estaba mirando con una gran sonrisa en su rostro, ¿cómo podía ser tan hermoso?

 - Justin me voy, tengo que prepararme para ver a mi hermana en media hora - dije levantándome de la cama.
 - Esta bien, mi guardaespaldas te esperará fuera de tu habitación, vas a estar con él todo el rato, no quiero que hables con nadie, si ves a la prensa no les mires, ignorales, será lo mejor que podrás hacer por ahora - me dijo Justin mirándome a los ojos.

Me encaminé hacía la puerta cuando sentí como su mano agarraba mi brazo, me acercó hacía él. Su cara estaba otra vez a centímetros de la mía, se acercó a mi oreja y susurró "ten cuidado preciosa, no quiero que nadie robe lo que es mío".


domingo, 9 de marzo de 2014

Capítulo 2. Parte 1.

Me senté en su enorme cama, no sabía como expresarle lo que sentía en ese momento y tampoco sabía si debía decírselo, pero Elena tenía razón, él era el único que me podía entender y ayudar en esta situación. Justin se sentó a mi lado, había muy poca distancia entre nosotros y por primera vez desde que le conocí eso no me resultó incómodo.
 - Justin, ¿alguna vez te has sentido odiado? - pregunté mirando la suelo.
 - Muchas veces, pero, ¿por qué me preguntas esto? - el tono de Justin despreocupado cambió radicalmente a un tono lleno de preocupación.
 - Si te digo que hace media hora me he sentido la persona más odiada del mundo, ¿me creerías? - dije mirándole a los ojos.
 - Si tuvieras razón para sentirte así claro que te creería, pero ¿por qué ibas a sentirte así?, ¿ha pasado algo que yo no sepa? - dijo arrugando la frente.
 - Si te digo que soy "el nuevo capricho de Justin Bieber", ¿qué pensarías? - dije apartando la mirada.
 - Que no es cierto y no sé de donde has sacado esa información - dijo buscándome con la mirada.
 - La televisión, Twitter..., todo el mundo piensa que soy tu nuevo capricho, mi Twitter está lleno de comentarios y sólo por salir del aeropuerto contigo, ¿cómo soportas esta presión diaria? - dije jugando con una pulsera que tenía en la mano izquierda.
 - Eli... lo siento, no sabía que esto ya había empezado, no creía que los rumores iban a empezar tan pronto - dijo tocándome la mano. - Lo siento...
 - No tienes nada por lo que preocuparte, lo superaré, estaré aquí unos días y luego me iré - dije agarrando su mano.
 - Pero yo no quiero que estés solo unos días, no quiero que te vayas, no sé por qué razón quiero que estés cerca mía, quiero que seas tú quien me mantenga los pies en el suelo - dijo Justin acercándose a mi cara.
 - ¿Qué me quieres decir con eso? No.. no entiendo - dije buscando una respuesta en sus ojos.
 - Quiero ser algo más que tu ídolo - dijo acercando sus labios a los míos.

En ese momento no supe como actuar, ¿qué estaba pasando? ¿Estaba besando al chico con el que soñaba cada día a cada rato?
Nuestro labios empezaron a jugar los unos con los otros, su suave lengua acariciaba mi lengua. Sus manos sujetaban mi cabeza y el beso se hacía cada vez más lento. No quería que ese beso acabará, me sentía a gusto cerca de sus labios, acarició mi mejilla y dejó que ese beso siguiera con nuestro deseo. Nuestros labios se separaron lentamente y dejamos nuestras frentes juntas.
Mis preocupaciones se alejaron a kilómetros de mi mente, nada tenía sentido, esto no era correcto, pero ¿a quién le importaba eso?

miércoles, 5 de marzo de 2014

Capítulo 1. Parte 9.

No entendí muy bien lo que me quería decir Justin, ¿preparada para qué?

 - Esto... no entiendo muy bien que quieres decir - dije bajando la cabeza intentando ocultar mi mirada.
 - Bueno lo entenderás estos días, no todo es de color rosa en mi mundo, espero que puedas con esto - dijo cogiéndome la cara subiéndola para arriba. Sus ojos tenían un color marrón muy clarito, en mi vida había visto unos ojos tan penetrantes.

A mi lado estaba Elena, me tenía agarrada por el brazo desde que entramos en el coche. Me acordé que estábamos en Las Vegas y tenía que ver a mi hermana.

 -¿Me permites llamar a una persona? Está esperando que le diga que he llegado- dije mirando a Justin.
 - Claro por supuesto, yo no soy tu jefe ni nada por el estilo, tómate esto como si fuera una especie de vacaciones, al menos por ahora - dijo sonriéndome.

Busqué el móvil por todo el bolso, no lo encontraba y me puse nerviosa, no podía haberlo perdido, este sería el tercer móvil que pierdo en lo que va de año, cuando me acordé que lo tenía guardado en el bolsillo de mi sudadera. Saqué el móvil y busqué el número de Andrea.

  -Si?
 - Hola Andrea, soy Eli, estoy ya en Las Vegas, ¿cómo estás?
 - Estoy bien, pero debería preguntarte a ti cómo estas, porque te acabo de ver por la televisión con la cara llena de flashes, ¿hay algo que me debas contar?
 - Ehh.. esto.. no me pillas en un buen momento, te dije que no te ibas a creer el por qué de viajar a Las Vegas.
 - Bueno yo no te digo nada, sólo que tengas cuidado con ese chico, no es uno de los mejores ejemplos de cantantes que hay en estos tiempos, sabes que no me cae bien.
 - Oh Andrea no empieces por favor, cuando llegue al sitio donde voy te llamo.
 - Vale princesa, ten cuidado que no me fío de ese.
 - Te quiero...

Hacía muchísimo tiempo que mi hermana no me llamaba princesa, bueno no me llamaba así desde que se fue a vivir con papá.
 - Eli, estás muy callada, ¿ha pasado algo? - dijo Justin mirándome preocupado.
 - No no tranquilo, simplemente no me creo que esté en un mismo coche con mi ídolo - dije sonriendole.

El coche se paró, estábamos en un parking subterráneo. Salimos todos, mi madre estaba andando delante mía hablando con Kenny, habían hecho muy buenas migas esos dos. Elena, Justin y yo estábamos hablando y Ryan y Javier estaban atrás hablando de música.

 - Oye Justin... ¿te puedo hacer una pregunta? - dijo Elena con una voz muy bajita.
 - Por supuesto que puedes, no como personas - dijo riéndose.
 - Bueno es que no estoy acostumbrada a hablar con mi ídolo - dijo Elena riéndose. ¿Cómo aguantas esto? Yo no podría vivir con veinte cámaras en mi cara a cada rato.
 - Bueno al principio fue raro, me encantaba hablar con ellos, pero después de algunas cosas que pasaron no los aguanto mucho, intento imaginar que no están ahí - dijo Justin poniendo su mano en mi hombro.

Elena rápidamente me miro y ví como sus ojos me decían "te dije le gustas", intenté no mirar a Elena porque me ponía nerviosa y tampoco podía mirar a Justin porque bueno era Justin, estaba a mi lado y no era muy normal.
Llegamos al hall del hotel y entramos todos al ascensor, Justin tocó el botón de la última planta. No tardamos mucho en salir. Nos llevó a una puerta.

 - Bueno aquí dormirá Elena y supongo que querrá dormir con su chico - dijo poniendo una sonrisa curvada.
 - En esta otra habitación dormirá la madre de Elizabeth, la señora Collins - dijo llevándonos a la siguiente habitación.
 - Y por último aquí dormirás tu Eli, mi habitación esta al lado de la tuya por si quieres venir a verme - dijo guiñándome un ojo.
 - Bueno no creo que ella se atreva a ir a tu cuarto estando yo por aquí cerca- dijo mi madre poniéndole una cara de advertencia.
 - Mamá!, él no estaba insinuando nada raro, no te pases... - la dije con voz irritada.

Después de estar hablando en el pasillo decidimos entrar todos en nuestro cuartos para poder ducharnos y relajarnos un poco del viaje. Cuando entré en el cuarto me quedé asombrada de lo grande que era, era como todo mi salón entero y parte de la cocina. Cuando salí de la ducha puse la televisión, estaban dando un programa de cotilleo, no me gustaba mucho, pero bueno se podía ver un rato. Empecé a vestirme cuando una noticia llamó mi atención. "El ídolo mundial Justin Bieber ha sido visto en el aeropuerto de Las Vegas agarrado de una chica desconocida, ¿será el nuevo capricho del ídolo?". No me lo podía creer, estaba saliendo en la tele, esto era a lo que Justin se refería a los rumores, al odio de los fans. Cogí el móvil para tranquilizarme, entré en Twitter y ese fue el mayor error que pude haber cometido.
Salí de ese cuarto, mis ojos estaban llenos de lágrimas, no sabía lo que hacer, busqué la puerta de la única persona con la que necesitaba hablar en este momento.
Toqué la puerta, me abrió después de unos cuantos minutos, su cara estaba llena de preocupación y sin decir nada escondí mi cara en el pecho de la única persona que me podía entender en este momento.

martes, 4 de marzo de 2014

Capítulo 1. Parte 8.

Mi corazón latía desbocado cuando Justin juntó mi cuerpo con el suyo en ese abrazo. Pude sentir el calor que emitía su cuerpo. No quería dejar de abrazarle nunca, no quería soltarle, quería que ese momento fuera eterno. Me di cuenta de como Justin salía despacio de mi abrazo y me agarraba por la cintura.
 - Eh.. hola, ¿qu... qué tal estás?- dije tartamudeando por los nervios.
 - Ahora que te he visto de nuevo estoy mucho mejor preciosa - dijo sonriéndome.

Recordé que no estábamos solos en ese avión y miré a mi alrededor, buscaba la mirada de la única persona que me importaba, Elena, ella estaba sonriéndome, agarrada del brazo de Javi. Mi madre estaba a un lado sonriendo y con los ojos acuosos.

 - Bueno chicos creo que deberíamos irnos, Justin ha sido muy irresponsable al venir aquí, esto está lleno de paparazzis - dijo Kenny regañando a Justin
 - Sé que no ha sido muy listo por mi parte, pero no podía esperar, tenía que verla ya - dijo Justin señalándome con la mirada.

No entendía nada, ¿qué era lo que pasaba?, ¿por qué estaba interesado el mayor ídolo juvenil en mí?
Nos pusimos a andar por un pasillo secreto que era sólo para famosos. Justin, Kenny y mi madre estaban delante mía y Elena, Javi y yo estábamos más atrás con un guardaespaldas a nuestro lado.

- Elizabeth, no me lo puedo creer, ¿has visto cómo te mira Justin?- dijo Elena susurrándome
- No, no lo he visto, no he notado nada, ¿cómo me mira? - dije agarrándola del brazo.
 - Cereza te mira como si fueras suya, ¿estás preparada para dar este paso? - dijo Elena mirándome seriamente.
 - Elena, creo que estás sacando las cosas de quicio, no voy a dar ningún paso por ahora - dije soltándome de su brazo molesta.
 - Eli, no te enfades, solo te estamos diciendo lo que pensamos - dijo Javi intentando calmarme.
 - No estoy enfadada con vosotros, estoy enfadada conmigo misma porque no entiendo nada, simplemente no lo entiendo. Él es Justin Bieber y yo soy Elizabeth Collins, soy una chica normal chicos, no soy especial - dije con tono decepcionante.
 - Da igual quién eres, lo importante es que él quiere dar este paso contigo Elizabeth - dijo Elena dándome un beso en la mejilla.

Justin nos cortó la conversación viniendo hacia nosotros con aspecto preocupado.
 - Chicos ahí fuera hay muchos paparazzis, tenéis que esconderos la cara como sea porque esto se pondrá muy feo- dijo cogiéndome el brazo.

Me puse la capucha y salimos todos juntos. Una ola de flashes inundaron mi cara, no sabía a donde mirar, no sabía que hacer. Sentí como Justin me empujaba hacía él escondiendo mi cara en su pecho. Elena y Javi estaban atrás cubiertos de guardaespaldas, esto era una locura, ¿cómo podía soportar Justin esto cada día?
Cuando llegamos al Jeep nos sentamos en el coche, estaba un poco asustada, no me esperaba esta reacción.
 - ¿Estás preparada para seguir con esto princesa? - me dijo Justin agarrándome de la mano.